Santiago García Sáenz
Para la muestra de Santiago García Sáenz que fue co-curada con Laura Lobos decidimos no escribir un texto sino reproducir pensamientos del artista
y estos fueron ploteados e intercalados entre las obras que del artista se exhibieron.
Decidimos que, de esta manera, sería la voz del artista la que se escucharía a través del texto en su primera muestra después de su temprano fallecimiento.
“…el recuerdo, la historia, las fantasías, los deseos: elementos fundamentales de mi trabajo como pintor hoy y siempre…”
S.G.S.
“…puedo sentir que hice mi obra, que está, que es visible…”
S.G.S.
“La pintura es mi búsqueda. Una búsqueda constante, una
peregrinación para alcanzar pacientemente la belleza y su fuerza libertaria…”
S.G.S.
“Plasmo en mi pintura algo que he visto, que he oído o que quizá simplemente
deseo que suceda. Insisto en recuperar la alegría a través de lo popular…”
S.G.S.
Las pinturas de Santiago García Sáenz nos convocan esta vez en el Instituto Filadelfia. Sus imágenes de la Sagrada Familia, los quehaceres
de las mujeres, la Virgen y el Niño, son el pretexto para hablar de la maternidad. Es en ese cuadro pequeño pero intenso, que muestra a una mujer
con su bebe recién nacido, que percibimos el misterio del amor materno. No vemos a la madre, su cara está vuelta hacia ese hijito que acaba
de nacer y en ese mínimo gesto captamos toda la hondura del vínculo, lo que ella es capaz de hacer, hasta dónde puede llegar.
Emparentada con los muchos Cristos de la Paciencia que pintó Santiago, dueña de una paz envidiable, esa madre resume todo un universo.
Y es ese universo el que Santiago García Sáenz nos regala una vez más hoy.
Delfina Helguera
Coordinadora de la Carrera de Curaduría de Arte
Instituto Filadelfia de Estudios Avanzados